Mucho antes de que se pusiera de moda la llamada “arquitectura verde”, en 1986 el arquitecto japonés Shigeru Ban ya experimentaba con tubos de papel reciclado para crear estructuras altamente resistentes.
Inicialmente el arquitecto utilizaba los tubos de papel únicamente de forma vertical en sus estructuras, jugaba con las dimensiones de éstos, e iba armando “muros de carga” con ellos alineándolos de forma recta o curva según el caso. Con esta técnica diseñó muchas casas en Japón muy diversas unas de otras.
Es un referente de la arquitectura humanitaria. Su historial de intervenciones tras terremotos (Kobe, 1995; Turquía, 2000; Bhuj, India, 2001; Puerto Príncipe, 2010 o Onagawa, 2011) levantando refugios se suma a los edificios de papel y cartón capaces de rehacerse pieza a pieza. Es el caso de la Iglesia de Papel de Kobe, reconstruida en Taiwán una década después. El año pasado concluyó una catedral de cartón en Christchurch, Nueva Zelanda y, con mismo material, la Sala de conciertos de L’Aquila, después del seísmo que sufrió la localidad italiana.
Pero no todos los proyectos de Shigeru Ban son efímeros, en el 2010 abrió sus puertas el Centre Pompidou enMetz, Francia. Lo más interesante de este proyecto es la estructura de la techumbre, para cuyo diseño Ban seinspiró en el tejido hexagonal del tradicional sombrero chino y lo recreó utilizando 16 kilómetros de madera.